martes, 24 de diciembre de 2013

Descubriendo el Terruño (Parte 2)


¡Hola amigos!

Vamos con la segunda y última parte de la visita al Terruño extremeño. 

A parte de grullas, vimos un montón de cosas más así que es una entrada bastante larga y variopinta. Seguimos en la Laguna Grande de la Albuera, frecuentemente visitada por aguiluchos laguneros. También había otras especies de aves acuáticas y limícolas, como este grupito de agujas colinegras:


Agujas colinegras


Esta laguna, acoge a otras aves durante la noche, aquí duerme un buen número de gaviotas sombrías:


Gaviotas sombrías


Gaviotas sombrías


Durante nuestra estancia en la laguna, sobrevuelan la charca amplios grupos de cormoranes grandes de diferentes edades:


Cormoranes grandes


Cormoranes grandes


Cambiamos de entorno. Estas maravillosas tierras ofrecen todo tipo de ecosistemas en muy pocos kilómetros cuadrados, cambiando la zona de lagunas por la estepa, el monte por los cultivos o la ribera por la dehesa.

Algo que me sorprendió nada más llegar el viernes al embalse de Montijo fue la presencia de aviones comunes, que marcharon ya hace muchas semanas de Burgos. También vimos calamones comunes.

Ya en el Terruño, nos movemos por diferentes caminos y nos encontramos con una amplia variedad de aves: Vimos fugazmente a los introducidos picos de coral. Pudimos ver abubillas, sedentarias aquí. Como las cigüeñas blancas, que están durante todo el año y en grandes números. Aguiluchos pálidos y elanios no eran difíciles de ver, como los alcaudones reales. Y en un golpe de suerte, observamos 3 avutardas alzando el vuelo en una zona habitual. 

Os dejo una serie de fotos de las especies que vimos durante estos recorridos:


Chorlito dorado europeo



Bisbita pratense



Pardillo común

 

Pareja de gorriones morunos, tan abundantes como los comunes



Cogujada montesina



Avefría europea



Lavandera blanca



Buitrón



Meloncillos



Meloncillos


En otro momento, Jero nos enseñó el sitio donde tieme montado el posadero. Por la zona había varios ratoneros, milanos reales e incluso garcillas bueyeras:


Milano real



Garcilla bueyera


También tuvimos la oportunidad de visitar el embalse de Nogales. Es un lugar bastante frecuentado, sobre todo por pescadores. Allí pudimos observar otras especies como garzas reales, somormujos lavancos o andarríos grandes:


Embalse de Nogales



Andarríos grande



Somormujo lavanco


El Terruño de Jero es su pueblo, Torre de Miguel Sesmero, una villa de unos 1200 habitantes. En las paredes de su iglesia, dedicada a su patrona la Virgen de la Candelaria, crían los primilla en primavera.




En el entorno del pueblo, se puede disfrutar de estampas tan bellas como esta, con el Castillo de Nogales de fondo:




El ganado ocupa las dehesas. Vacas, ovejas y cerdos están por todos los lados. También caballos y toros bravos.



Otro tipo de fotografía que estuvimos practicando fue la nocturna. Con la presencia de la Luna, y la ayuda de Jero, hice mi primera nocturna, parece tomada al atardecer pero era noche cerrada, con la Luna detrás nuestro, incluso se ve Venus en todo su esplendor:







Sin lugar a dudas una quedada inolvidable. Los que pudimos acudir disfrutamos de cada segundo y más yo, que visitaba el Terruño por primera vez y todo me parecía fascinante.


Lolo y Carlos frente a la Laguna Grande


En la casa, pasamos también muy buenos ratos al calor de la chimenea, charlas, comilonas, vasos anchos y procesando fotos:


Javi - Yo - Carlos - Lolo - Jorge - Jero (foto de Javi Conejero)


Muchas cosas quedaron en el tintero, el aspecto y las especies que hay aquí en primavera son totalmente distintas así que quedan pendientes para la próxima vez.

Por último, agradecer a todos y cada uno de los que hicieron posible el encuentro. Nos trataron como en casa en "La Fábrica", el alojamiento en el que estuvimos Lolo, Carlos y yo. Gracias de nuevo a Jero y a su familia por todo, por dedicarnos parte de su tiempo y atención, y a Javi y Jorge, a quienes conocí en persona al fin.

Espero que os haya gustado la entrada, para mí fue inolvidable.




Lo dicho, una experiencia inolvidable que habrá que repetir como sea.

A pasar todos una muy Feliz Navidad con vuestras familias y amigos. Esperemos que el  nuevo año venga cargado de buenos momentos y alegrías.

¡Un saludo a todos y hasta la próxima!

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Descubriendo el Terruño (Parte 1)


¡Hola amigos!

Como bien sabéis, Extremadura acoge durante todos los inviernos a la mayor parte de las grullas que, venidas desde el Norte de Europa, deciden invernar en nuestro país. El clima más suave, las zonas de descanso y el alimento, son las claves.

El viernes, Lolo Mata y yo pusimos rumbo sur bien temprano para asistir a este espectáculo de la Naturaleza del cual tenemos unas cuantas fotillos que mostrar.

En esta primera entrega, voy a publicar únicamente fotografías de grullas, ya que son las verdaderas protagonistas en esta época. Todos los días, intentamos fotografiarlas en diferentes lugares y en diferentes momentos. Estas aves son muy rutinarias y cada día completan el mismo ciclo desde que sale el Sol hasta que se pone.

Uno de los factores más importantes es la luz. Si la tarde está despejada, tardarán más en entrar al pre-dormidero ya que tienen más minutos de luz para comer, pero saldrán antes por la mañana con las primeras luces del amanecer. Sin embargo, si la tarde está nublada, volverán de las dehesas más temprano porque oscurece antes y saldrán del agua más tarde porque la luz del Sol no es tan fuerte durante los primeros momentos del día.

Y digo del agua porque "nuestras" grullas, pasan la noche con las patas a remojo, así se sienten más seguras y protegidas de posibles depredadores. Estas, duermen en la Laguna Grande de la Albuera.





Grullas saliendo de la laguna a primera hora entre la niebla


Familia de grullas (joven - adulto -adulto) saliendo de la laguna

Las grullas, dejan sus dormideros para dispersarse por las amplias dehesas de los alrededores donde el sustento, principalmente bellotas, está asegurado. 


Familia de grullas 



Joven y adulto sobrevolando la zona de alimento








Las zancudas, se pasarán el día comiendo y desplazándose de un campo a otro. Cuando la luz empieza a bajar, las primeras escuadras se dejan ver en el rojo horizonte, deleitándonos con sus formas y sus profundos y constantes trompeteos. El ocaso es el momento en el que nuestras protagonistas se dirigen al pre-dormidero, que será una tierra de labranza o sembrado, donde tienen mejor campo de visión.

























Los primeros grupitos de grullas toman tierra. Lo primero que hacen es juntarse y vigilar la zona, cerciorándose de que no hay ningún peligro a la vista. Una vez calmadas, se mueven picoteando el suelo y se acicalan el plumaje.









Cuando ya casi no se ve e incluso cuando la noche es cerrada, las aves abandonan los cultivos y despegan rumbo a la charca, donde amerizan una detrás de otra. Y vuelta a empezar...

Y termino esta primera parte con una pequeña reflexión personal:

Muchas veces, el ser humano se pregunta cómo sería aquello del paraíso. El caso es que, en todas esas suposiciones, la Naturaleza lo inunda todo; animales, flores, ríos, árboles frutales, montes... 

Pues bien, durante los casi 4 días que he estado por tierras extremeñas, es lo que yo he sentido en todo momento ya que el Terruño lo tiene todo, y si encima le añades la compañía de personas cuyo corazón se le sale del pecho, pues no puedes pedir más.

 Una de esas personas es Jero Milán, gran fotógrafo y amante de la Naturaleza. Yo siempre digo y diré que soy un afortunado por haber podido conocerte, formar parte de tu grupo de amigos y tenerte como maestro. No tendré tiempo suficiente para agradecerte todo lo que me has enseñado y has hecho por mí. Ha sido muy especial para mí el poder adentrarme en tu tierra por primera vez escuchando tus explicaciones, es algo que nunca olvidaré.



Os cito aquí para la segunda parte sobre la visita al Terruño extremeño.

¡Un saludo a todos y hasta la próxima!

viernes, 13 de diciembre de 2013

¿Qué hay de nuevo Milvus?



¡Hola amigos!

Como os dije en la entrada anterior, esta semana tenía pensado volver a la zona del dormidero de milanos donde las probabilidades de fotografiarlos son más altas y, aunque las "condiciones" las ponen ellos, el resultado final se acerca bastante a lo deseado.

Os dejo la serie que le hice al que se pasó por allí el lunes, con las últimas luces de la tarde:


Milano real



Milano real



Milano real


Milano real



Milano real



Milano real


Hoy mismo me marcho hacia tierras extremeñas con Lolo Mata (ahora mismo estamos viajando) para reunirnos allí con parte de la tropa a pasar unos días. A la vuelta os cuento y os enseño todo lo vivido allí.

Espero que os hayan gustado las fotos. 

¡Un saludo a todos y hasta la próxima!